“Vale madres, aviéntenles granadas”

Por LENIN OCAMPO. Tomado de La Jornada Gro. 13 de diciembre del 2011.

Chilpancingo, 12 de diciembre. Al mediodía, un grupo de estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa intentaron bloquear la autopista del Sol, para exigir una audiencia con el gobernador Ángel Aguirre Rivero; pero un grupo del operativo Guerrero Seguro los atacó a tiros.

Los estudiantes, en su mayoría hijos de campesinos, intentaban bloquear la principal carretera que comunica con Acapulco, donde cientos de turistas regresaban del puente guadalupano.

A las 12:20, un convoy de siete patrullas de la Policía Federal llegó para intentar desalojarlos, por lo que los estudiantes se pertrecharon junto a sus autobuses y buscaron piedras y palos para intentar enfrentarse con los uniformados, que portaban armas largas y chalecos antibalas.

La orden fue desalojarlos, aunque un federal le recriminó a su jefe: “pero no tenemos equipo antimotines”.

–Eso vale madres, actúen y aviéntenles las granadas (lacrimógenas) –le respondió.

Los federales accionaron una bomba de humo y uno de los estudiantes respondió incendiando el aceite que estaba en una de las gasolineras que se encuentra a la salida de Chilpancingo.

Del grupo de policías federales salieron los disparos a mansalva contra los estudiantes, argumentando éstos que les estaban tirando, pero los únicos disparos provenían del personal de la Policía Ministerial del estado.

Detrás del humo, el cuerpo de Alexis Herrera, de Atoyac, y de unos 19 años, estudiante campesino, cuyas armas era una mochila y una piedra.

Su cuerpo quedó en el carril que va de Chilpancingo hacia Acapulco, los federales sólo le tomaron fotos y riendo decían que “una piedra lo mató”.

En el carril que va hacia Chilpancingo, Gabriel Echeverría, tirado boca abajo y mochila en la espalda, derramaba sangre.

Por su parte, la Ministerial, al mando del procurador Alberto López Rosas, continuaba con las detenciones de estudiantes que se encontraban cerca del lugar, e incluso de gente ajena.